Qué pasaba con la salud del Papa Francisco

El Papa Francisco sufría afecciones respiratorias, estás mismas fueron degenerando su salud y el desenlace no era el esperado, luego de su alta y mejoría, Francisco falleció luego de celebrar el Domingo de Resurrección.

Para poder comprender mejor sobre las afecciones pulmonares que padecía Bergoglio, conversamos con Agustín Patrone, médico especialista en medicina interna, residente de  Neumonología en el último año en el sanatorio Güemes en CABA.

Valeria Elías 

RTS Medios

¿Es hereditaria la enfermedad del Papa o es congénita?

– La enfermedad pulmonar que lleva a la internación al Papa Francisco no es hereditaria, ni congénita. Pero si puede estar favorecida por sus condiciones preexistentes de salud.

Su historial médico indica que, a los 21 años, sufrió una infección pulmonar grave, lo que llevó a una resección parcial de un lóbulo pulmonar. Como secuela de esta cirugía, ha desarrollado bronquiectasias secuelares, una afección crónica en la que los bronquios se dilatan de forma anómala, acumulando mocos y facilitando infecciones recurrentes.

A esto se suma un diagnóstico de asma crónica, lo que agrava su susceptibilidad a infecciones respiratorias y episodios de insuficiencia respiratoria.

 

¿Cómo se detecta, tiene cura, cuál es el tratamiento?

– Bronquiectasias secuelares, son dilataciones anómalas y persistentes de los bronquios. Se diagnostican con tomografías computarizadas y también pueden servir estudios de función pulmonar. Su manejo incluye drenaje postural, fisioterapia respiratoria, broncodilatadores y antibióticos en caso de exacerbaciones infecciosas. En cuanto al asma crónica persistente, es una enfermedad obstructiva caracterizada por la variabilidad de los síntomas causados por la reactividad de los bronquios. Puede desencadenarse por factores alérgicos o exposicionales en el ambiente. Se diagnostica mediante pruebas de función pulmonar (espirometría entre otras) y antecedentes clínicos de sibilancias, falta de aire y tos crónica.

Se controla con corticosteroides inhalados, broncodilatadores de acción prolongada, dentro de las medidas iniciales de tratamiento

Respecto a la neumonía bilateral aguda, es una condición donde existe una infección respiratoria que abarca parcial o totalmente ambos pulmones Se confirma con radiografía de tórax o tomografía, junto con análisis de sangre y cultivo de esputo para determinar el agente causal. Incluye antibióticos (si es bacteriana), antivirales (si es viral), oxigenoterapia y ventilación mecánica en casos graves. En el caso del Papa Francisco, ha requerido hospitalización y administración de oxígeno debido a la insuficiencia respiratoria secundaria a su enfermedad pulmonar preexistente.

 

A la edad que tenía Francisco, ¿existía la posibilidad de una mejora total?

– Dada la combinación de bronquiectasias secuelares, asma crónica y neumonía bilateral, la posibilidad de recuperación total puede llevar más tiempo que en otros pacientes. Si bien su estado podría haber mejorado con el tratamiento adecuado, la presencia de lesiones pulmonares irreversibles y la edad avanzada (88 años) hicieron que el riesgo de complicaciones sea elevado. La recuperación dependía de su capacidad para manejar las exacerbaciones y evitar nuevas infecciones.



Según los datos que se conocían sobre su salud, ¿era recomendable que siga cumpliendo funciones?

– El Papa Francisco ha mantenido su actividad pese a sus condiciones pulmonares crónicas. Sin embargo, su reciente neumonía bilateral aguda, acompañada de crisis asmáticas han generado preocupación sobre su capacidad para continuar en el cargo. Aunque su estado había mostrado mejoras leves, el Vaticano había comenzado a discutir la posibilidad de una transición en el caso de que su salud se deteriore aún más.



Consejos para sobrellevar patologías pulmonares como las del Papa Francisco

– Para personas con antecedentes de bronquiectasias, asma crónica y neumonías recurrentes, se recomienda:

Vacunación anual contra virus respiratorios y neumococo, sobre todo en población de riesgo.

Fisioterapia respiratoria para mejorar el drenaje del moco en bronquiectasias.

Ejercicios respiratorios y rehabilitación pulmonar para fortalecer la función pulmonar.

Evitar factores desencadenantes del asma, como humo, contaminación, humedad, entre otros factores desencadenantes

Con estas estrategias, es posible mejorar la calidad de vida y prevenir complicaciones respiratorias graves.

 

El Papa Francisco enfrentó una combinación de enfermedades pulmonares crónicas y agudas que comprometieron su capacidad respiratoria. Su estado último requería monitoreo constante, fisioterapia respiratoria y control riguroso de infecciones. Aunque podía estabilizarse, el riesgo de nuevas complicaciones era alto debido a sus antecedentes médicos y edad avanzada. Francisco murió, finalmente, de un derrame cerebral y una posterior insuficiencia cardiaca irreversible, declarado por el médico del Vaticano Andrea Arcangeli en el certificado de defunción del pontífice.