«Las personas trans recién entramos en democracia con la ley de identidad de género»

Soledad Benítez explicó por RTS Noticias el cambio que implicó para las personas trans la sanción de la norma en 2012. Además, valoró que la norma no patologiza las identidades, a diferencia de legislaciones de otros países.

A 13 años de la sanción de la Ley de Identidad de Género en Argentina, la activista trans Soledad Benítez destacó el impacto que tuvo el reconocimiento legal de las identidades autopercibidas. Según expresó, la norma marcó un antes y un después en el acceso a derechos básicos como la salud, la educación y el sufragio para el colectivo trans.

 

Benítez señaló que, antes de 2012, “las personas trans no podíamos gozar del derecho a tener un documento que reflejara nuestra identidad”. En ese sentido, recordó las dificultades para acceder a servicios básicos: “No podíamos ir a centros de salud porque no nos llamaban por nuestro nombre”. También destacó que votar era una situación conflictiva, ya que en el padrón figuraban nombres que no coincidían con la identidad autopercibida.

 

La militante subrayó además el contexto legal previo a la ley, mencionando que hasta 2010 en Santa Fe seguían vigentes los códigos de falta. “Eran una vergüenza para la democracia”, afirmó, y explicó que criminalizaban las identidades trans bajo argumentos de moral pública.

 

Para Benítez, la aprobación de la ley también implicó un compromiso del Estado: “Hoy encontramos personal capacitado para hacer trámites con respeto y agilidad”, sostuvo. Además, valoró que la norma no patologiza las identidades, a diferencia de legislaciones de otros países.

 

“La ley nos dio derechos sin exigirnos pruebas médicas. Solo con nuestra voluntad alcanzó”, concluyó.

Fuente: RTS Medios