En el día del Cervecero artesanal, debemos destacar que una ciudad cervecera como Santa Fe, tiene mucho para decir, para celebrar, para compartir. Existen diferentes estilos y tipos de cerveza artesanal, Daniel Llinas es uno de los pioneros que incursionaron en esta actividad.
En la tradición cervecera existe implícita una fraternidad. Una hermandad entre quienes producen cerveza y quienes la consumen, casi como un rito sagrado, el momento del primer sorbo y la reacción a un nuevo sabor o receta.
Los artesanos de la cerveza, tienen una característica especial, son exigentes con el paladar, prácticos a la hora de resolver, y creativos para combinar sabores y aromas. El maridaje para ellos, también es algo esencial, no cualquier cerveza se toma con cualquier comida, ni compañía.
Para conocer más sobre esta labor, RTSMedios salió en busca de respuestas. Daniel Llinas, socio fundador de Palo y Hueso, experimentado catador de cervezas, y cocinero cervecero.

Valeria Elías
RTS Medios
La primera inquietud tiene que ver con ¿Cómo caracterizar a un cervecero artesanal?: “La verdad que los que estamos metidos en este rubro, creo que entramos por curiosidad. Hay algo que nos llevó a hacer algo diferente. Está muy de la mano también por el gusto de las historias y el gusto de los por qué. ¿Por qué en ciertos lugares se dan cierto tipo de cerveza? ¿Por qué ciertos ingredientes influyen de una forma y no de otra? Hay también un tema de curiosidad, y ese interés de búsqueda, de probar cosas nuevas, de traer estilos históricos o estilos ya probados, revivirlos y poder darle un toque personal” explicó Llinas.
Como todo trabajo creativo, comienza con la curiosidad, la gastronomía cervecera no es escapa de esta premisa, pero cómo se va creando un cervecero “Creo que lo primero que hay que hacer es leer, estudiar, aprender, juntarse con gente que sabe, compartir tus cervezas, tratar de conseguirte un grupo de amigos que pueda probarlo y no que te den opinión porque te la dan gratis, sino que buscar gente del rubro que siempre está dispuesta a ayudar. Esto es algo que hicimos desde que empezamos, nos ayudó un montón de gente y vamos a ayudar a un montón de gente más, nosotros” expresó el entrevistado.
Luego agregó: “El martes, justo en esta semana, se cumplen 22 años de mi primer cerveza hecha, mi primer cerveza elaborada en casa, siempre pensando en el objetivo de tratar de llegar a la mitad de camino a lo que llegué hoy, la verdad que hemos crecido un montón, pero cuando empezamos en Santa Fe, recuerdo que era una pelea contra molinos de viento no sé, tenía mucho que ver ese romanticismo (una vez me dijeron que éramos unos románticos) ese romanticismo de que se podían cambiar las cosas y que podíamos hacer algo nuevo y que podríamos mostrarle a la gente que hay otra cerveza que no es la mainstream o la cerveza de grandes fábricas de millones de litros diarios”.
“Ahora – continúa- si me preguntás, sí, me acepto y me considero culpable de todo lo que pasó a nivel local y a nivel nacional. Esto de que las grandes cervecerías se hayan puesto a fabricar ipas, que grandes cervecerías hayan simulado sus marcas para que se parezcan artesanales, pero están muy lejos de serlo”.
“En cuanto a las capacitaciones que doy, cuando todo el mundo me pregunta qué es una cervecería artesanal, hay una frase que dijo un cervecero norteamericano, que está muy buena, que es: ‘cuando la receta la define el maestro cervecero y no la define el de costos’. A ver, esto es un negocio, obvio que tenemos que hacer las cosas para que entren dentro de los costos, o venderlas a mayores precios o tratar de hacer que nuestra cerveza nos rinda plata, porque está claro que esto es una empresa. Pero hay una que acuñé yo en todo este tiempo, y es que ‘cuando todas las personas involucradas en la cervecería artesanal aman y viven con pasión lo que es la cerveza artesanal, vos tenés que saber de lo que estás hablando’. Y hemos visto que las grandes cervecerías han usado mal los nombres de estilo de la cerveza, los han cambiado, han hecho cosas aberrantes, como sacar una foto con alcauciles, como si fueran lúpulos, porque nadie sabe lo que está haciendo. Hay una cabeza que les da el ok, que le dice ‘si, está bien’ o ‘está mal’, porque no les importa más allá de sus intereses competitivos” finalizó el cervecero.
Cuna cervecera
Si bien, Santa Fe nace como una ciudad cervecera industrializada, este nuevo auge de elaboración artesanal le dió una nueva perspectiva de consumo y preferencia que aumenta la cantidad de litros consumidos por ciudadano.
Al respecto, Daniel Llinas dijo “Yo creo que después de todos estos años, podemos decir que la ciudad de Santa Fe hoy sabe lo que es una cerveza artesanal, sabe dónde buscarla, sabe si quiere aprender a dónde ir, sabe dónde comprar insumos. Creo que cuando nosotros arrancamos, particularmente, cuando yo arranqué hace 23 años, conseguíamos lo que podíamos, información mezclada y rara, así que creo que hoy está más fácil y accesible, creo que podemos considerarnos culpables de todo eso”.
Reflexionando sobre algunos dichos que circulan sobre la cervecería artesanal, el especialista opinó “Puedo agregar algo que estuve también pensando hace un tiempo, eso que dicen que la cerveza artesanal es una moda, yo digo que sí, es una moda. Que empezó con los egipcios cuando les pagaban a los operarios con cerveza, que estuvo durante la peste negra reemplazando el agua porque era la única forma de tomar una bebida y que pudo mantener al pueblo vivo, porque la peste negra, estaba en la contaminación en el agua y que la cerveza, los procesos cerveceros hacían de que el agua y, el producto final, la cerveza sea saludable, que te permitiera seguir viviendo. Fue una moda que viene desde hace un montón de años y que por suerte hoy sigue siendo una moda y va a seguir siendo una moda por millones de años más”.

Pasión y decisión
Elegir la vida de un maestro cervecero, es la de atreverse a inventar y reinventarse, la de perder horas de sueño y momentos familiares en pos de crear algo más grande, un sabor, un aroma, una marca para el paladar que sea compatible con el amor, la amistad y los buenos momentos.
Daniel Llinas, para finalizar declara “lo que me apasiona de ser cervecero es seguir encontrando gente en todo el mundo apasionada, seguir encontrando pares que quieran compartir sus cervezas, que quieran compartir sus historias, sus recetas, sus modos de uso, sus procesos. La verdad que sigue siendo lo más lindo todo esto, a mí me apasiona viajar, me encanta viajar y yo cuando viajo, mi viaje es cien por ciento cervecero, ya busco la cervecería local, me contacto antes con el cervecero, lo voy a ver, le llevo un presente, me traigo otro presente, hemos entrado a lugares que pensábamos que no íbamos a entrar, cervecerías muy grandes artesanales y hemos recorrido los rincones más prohibidos, por así decirlo, de fábricas que uno pensaba que no podía pasar ni por la puerta. Creo que todavía nos moviliza poder tomar algo que está cerca de las que la elaboración del producto y el consumidor están muy cerca. Por más tamaños grandes que tengan algunas cervecerías artesanales, uno logra sentir que hay un cuidado, un respeto y una búsqueda de sabores, sensaciones y todo un entorno que te da esa alegría de ser cervecero”.
Fuente: RTS Noticias