El segundo y más polémico punto fue el cultural. Milei afirmó que si un inmigrante llega a un nuevo país, «si se adapta, no es ningún problema. El problema es que si no se adapta a tu cultura, entonces es una invasión».

 

Para graficar su punto, describió un escenario hipotético en el que una comunidad es superada en número por recién llegados con ideas distintas. «Vos les das igualdad de derechos y van a una votación y te cambian y entonces ahora vos no podés tener tu base cultural que traías porque tuviste una invasión», explicó, y concluyó: «Es una invasión menos violenta, pero sigue siendo una invasión».