Vecinos comenzaron las tareas de limpieza luego de dos días con agua dentro de sus viviendas. “No creímos que se iba a venir tan rápido”, relató un damnificado.
Tras el desborde del río Carcarañá ocurrido el martes, varias familias de la localidad de Correa regresaron este viernes a sus viviendas para comenzar con las tareas de limpieza y evaluar los daños. La crecida afectó principalmente a los barrios ubicados a menos de 100 metros del cauce.
Uno de los vecinos, Elías, contó que el agua entró durante la madrugada y permaneció en su casa por más de 48 horas. “Muchos perdimos, un poco algo sacamos. Lo más sensible, lo más liviano, pero lo más pesado no pudimos”, explicó. Agregó que debieron evacuar dentro del mismo predio por temor a robos: “Ya nos han robado varias veces”.
Los afectados aseguran que hubo falta de previsión en la alerta emitida por Defensa Civil. Según Elías, se les informó que el pico de crecida ya había pasado, pero horas después el agua ingresó con fuerza. “No fue el pico, y nada, perdimos varias cosas”, afirmó.
Los vecinos también vinculan la magnitud del daño con obras realizadas en años anteriores. “A partir de que una obra del molino Semino levantó el tajamar, empezamos a tener problemas”, indicó uno de los residentes, que lleva 30 años viviendo en la zona.
Las familias afectadas solicitan colaboración de la comunidad con muebles, ropa y elementos de primera necesidad. Algunos hogares continúan inaccesibles debido al anegamiento y los destrozos.
Fuente: RTS Medios