La dirigencia tomó la decisión de terminar el ciclo de “Pintita” como director técnico de Boca.
En el mismo momento que el penal mal ejecutado por el volante Alan Velasco posibilitó la atajada del arquero de Alianza Lima y dejó a Boca afuera de la Copa Libertadores, quedó sellado el destino de Fernando Gago.
El mediocampista, que fue la adquisición más cara de Boca en su historia, ya que costó 10 millones de dólares, no pudo darle el pase a la fase siguiente del torneo continental, el máximo sueño de todos los hinchas “Xeneizes”, y dejó en una clara posición de declive a «Pintita» Gago.
Durante esa semana se especuló con su despido, pero fue el propio Gago, cansado de las versiones, quien encaró a Marcelo Delgado, el más allegado al cuerpo técnico e integrante del Consejo de Fútbol, y le preguntó si pensaban echarlo, situación que fue negada rotundamente por el “Chelo”.
Así continuó la historia, con 9 triunfos sobre 10 partidos en el Torneo Apertura, aunque la caída en Rosario ante Newell´s generó nuevas turbulencias.
Gago era consciente de que estaba en la cuerda floja, pero siguió. El Consejo de Fútbol ya le había bajado el pulgar en la infausta noche ante el equipo peruano, cuando tras la eliminación, gran parte de los simpatizantes que estaban en La Bombonera comenzaron a gritar » que se vayan todos».
Gago siguió aunque no tenía níngún tipo de respaldo, y a sabiendas de que si no ganaba el Torneo Apertura de la Liga Profesional, que le permitiría a Boca acceder nuevamente a la Copa Libertadores pero recién el año próximo, iba a ser despedido.
Finalmente, su salida se dio tras la caída ante River Plate en el Monumental, por 2 a 1, cuando fue cuestionado duramente por toda la afición “Xeneize” por el esquema táctico utilizado y por sentirse inferior al rival de todos los tiempos.
«Hemos tomado una decisión: es que hasta acá ha llegado Fernando Gago y su cuerpo técnico con la institución», anunció Mauricio Serna esta mañana en el Complejo de Ezeiza, antes del comienzo de la práctica del plantel profesional, que recién volvía a los entrenamientos tras un día de descanso.
«No ha sido fácil porque es un hombre de la casa, pero para eso estamos, para tomar decisiones», expresó el colombiano, quién fue enviado por el presidente Juan Román Riquelme para dar la noticia.
Riquelme no fue a la cancha el domingo pasado, aunque sí lo hizo el resto de la comisión directiva. Observó desde su casa la caída de Boca, que ahora ve peligrar su ventaja sobre River en el historial, ya que la cantidad de partidos de diferencia se acortó a sólo cuatro encuentros.
La decisión de despedir a Gago ya estaba tomada desde aquel penal que atajó Guillermo Viscarra, el arquero de Alianza Lima, que provocó el peor fracaso en la historia deportiva de Boca Juniors, en la propia Bombonera.
En el predio de Ezeiza se analiza la contratación de un nuevo entrenador y se piensa en Cristian «Kily» González, el ex entrenador de Unión de Santa Fe.
También suena el ex técnico de Inter Miami, Gerardo «Tata» Martino, quién finaliza su contrato con «Las garzas» este 1° de mayo y quedará totalmente desvinculado del club estadounidense, pese a que no ejerce como entrenador y fue reemplazado por Javier Mascherano.
Otras opciones son las de Gustavo Quinteros, Eduardo Domínguez (aunque actualmente está en Estudiantes de La Plata), Gabriel Milito y Rodolfo “El Vasco” Arruabarrena, que ya ocupó el cargo de entrenador de Boca entre 2014 y 2016.
Fuente: Noticias Argentinas