Día del periodista: la realidad que golpea a todos, pero también a la profesión

Mariano Moreno decidió fundar el diario el 7 de junio de 1810, nunca imaginó lo que vendría después en Argentina. Este día fue aprobado por el Primer Congreso Nacional de Periodistas en Córdoba en 1938 conmemorando la fundación de La Gazeta de Buenos Ayres.

Valeria Elías

RTS Medios

Entre los redactores más destacados que tuvo el periódico se destacan integrantes de la Primera Junta, además de Moreno lo integraron Juan José Castelli y Manuel Belgrano, compitió con diarios como El Censor, El Independiente, El Grito del Sud, Prensa Argentina y Mártir o Libre dirigida por Bernardo de Monteagudo.

Pero el periodismo de ayer no es el de hoy, nunca hubieran imaginado que un simple ciudadano (vecino en aquella época) se convierte en periodista por reportar o dar a conocer un hecho o incidente. Tampoco imaginaron la televisión, ni las redes, donde pululan versiones de noticias, reales o falsas, y un bagaje de información con un caudal mucho más amplio que lo que podían manejar ellos en esa época.


El periodista Guillermo Tepper, conversó con RTS Medios y analizó el contexto global de la profesión.

“En primer lugar, observo,-comienza diciendo Tepper- como en tantas otras cuestiones, un poder centralizado del periodismo en el ámbito de la Capital Federal, fundamentalmente en los canales de televisión. A esto hay que sumarle un sesgo ideológico o político muy marcado por encima del periodístico. Este factor no es nuevo en la Argentina, pero en estos tiempos, está agudizado por el nivel de violencia verbal proveniente desde el poder”.


Luego agregó: “Pero todavía sobreviven periodistas independientes, sobre todo en el interior del país, que están al margen de identificarse abiertamente con los bandos políticos en pugna. Las nuevas tecnologías, muy valiosas en numerosos ámbitos, también contribuyen, en muchos casos, a la confusión general. La simplificación de contenidos en pocas líneas atentan contra la verdadera información que la ciudadanía requiere”.


“Los anónimos en las redes generan determinadas corrientes de opinión, muy difíciles de revertir. No ocurre lo mismo en los medios tradicionales (Diarios, Radios y Televisión) donde los periodistas firman sus notas en los medios gráficos, hablan con su nombre y apellido en los medios electrónicos y son responsables de lo que dicen o dejan de decir.  El futuro del periodismo es imprevisible, más aún con la llegada de la Inteligencia artificial en las redes. Como alguna vez escribió el historiador israelí Yuval Noah Harari  (Autor de Nexus y 21 Lecciones para el Siglo XXI , entre otros) ‘con el ingreso de estas nuevas tecnologías hasta puede ponerse en riesgo la propia democracia al no poder la ciudadanía distinguir entre lo verdadero y lo falso’” concluyó el entrevistado.

Fuente: RTS Noticias