En el preselectivo hay cinco deportistas rosarinas. «Es un proceso a largo plazo que requiere esfuerzo de todos», afirmó el entrenador Marcelo Berto.
La selección argentina femenina de waterpolo trabaja con jugadoras de corta edad de cara al próximo torneo Panamericano, que se disputará desde el 1 de septiembre en Brasil. El cuerpo técnico, encabezado por Marcelo Berto, destacó que el proyecto es reciente y que enfrenta dificultades económicas que deben resolver en conjunto con las familias.
«Es un proceso que empezó hace poco y nunca antes se había hecho con chicas tan jóvenes», explicó Berto en diálogo con RTS Deportes. El equipo se conformó a partir de un relevamiento nacional realizado en 2023, del cual participaron inicialmente 72 jugadoras. Tras una primera selección, quedaron 50 chicas que integran las concentraciones regionales y nacionales.
El cuerpo técnico está compuesto por tres entrenadores: Marcelo Berto y Verónica Grieco, quienes coordinan entrenamientos en distintas zonas del país. Las concentraciones nacionales se realizan los fines de semana, siempre que se logren conseguir horarios y espacios en las piletas disponibles.
Berto remarcó que el principal obstáculo es económico. “Si no fuera por el aporte de los padres, sería imposible lograr todo esto. Ellos organizan viajes, alojamiento y colaboran para que ninguna jugadora quede afuera por razones de dinero”, señaló. También destacó que, a diferencia de selecciones como Canadá o Estados Unidos, Argentina compite en desigualdad de condiciones.
Pese a las dificultades, el equipo mantiene expectativas altas para el torneo y busca sostener el desarrollo de esta base juvenil. “Esto no termina en el Panamericano. Las chicas vuelven, se reabre la convocatoria y seguimos trabajando”, concluyó Berto.
Fuente: RTS Medios