La referente de la Campaña Nacional por el Aborto Legal repasó el camino hacia la sanción de la norma y advirtió sobre dificultades en su implementación. “Se abre una etapa de monitoreo permanente”, afirmó.
A cinco años de la sanción de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, Martha Rosenberg, una de las fundadoras de la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito, analizó en RTS Noticias la situación actual del derecho en la Argentina, el proceso que permitió su aprobación y los desafíos que enfrentan las nuevas generaciones para sostener lo conquistado.
En primer lugar, Rosenberg puso el foco en los obstáculos que hoy dificultan el acceso efectivo al aborto legal. Señaló la suspensión de compras de medicamentos, el aumento de precios, la reducción de horarios de atención y prácticas de maltrato institucional. “Se han disminuido las horas de atención y eso genera colas, esperas y maltrato, tanto burocrático como en el cara a cara”, sostuvo.
Otro de los puntos centrales fue el uso irregular de la objeción de conciencia en el sistema de salud. Rosenberg advirtió que existen servicios completos que se declaran objetores, a pesar de que la ley lo prohíbe. “Hay servicios que se declaran objetores de conciencia, lo cual es totalmente ilegal, y nadie se ocupa”, afirmó, y remarcó que esta práctica se convirtió en una forma extendida de obturación del derecho.
Al repasar cómo se llegó a la sanción de la ley en diciembre de 2020, Rosenberg recordó que se trató de un proceso de largo aliento. “Sin los 20 años de campaña no se hubiera logrado que se aprobara la ley”, expresó, y destacó el trabajo sostenido para sacar el aborto del silencio, la clandestinidad y la criminalización.
En ese camino, señaló que el factor decisivo fue la construcción de un movimiento social amplio con un objetivo político definido. “Lo que cambió fue la militancia feminista y el propósito de incorporar este derecho como un derecho humano básico de las mujeres y las personas gestantes a decidir”, indicó, al referirse al crecimiento de la movilización y su llegada al Congreso.
Rosenberg también subrayó que la legalización del aborto tuvo un impacto político más amplio. “La legalización del aborto es la lucha por la construcción de un sujeto político con capacidad de decidir sobre su vida sexual, familiar y sus proyectos”, afirmó, y vinculó ese avance con la articulación de distintas luchas del movimiento feminista.
Finalmente, dejó un mensaje dirigido a las juventudes que hoy acceden a este derecho. Consideró la ley como un legado de las generaciones anteriores y advirtió que no debe darse por garantizada. “Nunca los derechos están definitivamente conquistados, hay que defenderlos”, sostuvo, y llamó a inventar nuevas formas de militancia para sostener y profundizar las conquistas logradas.
Fuente: RTS Medios