Caso $Libra: tras la formación de interbloques en Diputados, ¿cómo queda integrada la comisión investigadora?

La paridad de fuerzas entre oficialistas y opositores va a desembocar en una profundización de la disputa por la conducción del cuerpo.

La creación de la comisión investigadora por el caso $Libra en la Cámara de Diputados fue una victoria política de la oposición, pero se trató del primer enfrentamiento en el marco de una guerra que tendrá más de un frente de batalla abierto y varios capítulos por contar.


Una vez asumida y metabolizada la derrota en el recinto, La Libertad Avanza y su principal socio, el PRO, activaron anticuerpos defensivos para resistir la agresión opositora.


Valiéndose del reglamento para la conformación de los miembros de la comisión investigadora, armaron interbloques con diputados afines que estaban sueltos y llegaron a 40 integrantes, lo que les permitió sumar un integrante adicional en el nuevo cuerpo legislativo, equilibrando fuerzas con la oposición.


Desde Unión por la Patria y Encuentro Federal salieron con dureza a denunciar fraude y trampa política, pero lo cierto es que el artilugio usado por el PRO y LLA era lícito de acuerdo a la redacción que se acordó en el recinto.


Perdida por perdida, UP actuó en espejo con el PRO y LLA al prestarle dos diputadas al Frente de Izquierda: Mónica Macha y Julia Strada.


Con la incorporación de las dos kirchneristas del flamante bloque “Nacional y Popular”, el interbloque FIT-Unidad se hizo acreedor de un nuevo lugar en la comisión, que producto del acuerdo político se lo cedió a Strada.


Este nuevo entente trosco-peronista, que ya se había mostrado en las calles pero nunca antes en las instituciones, le permitía sumar un nuevo integrante en la comisión y de esa manera volver a superar en número al oficialismo por 14 a 13.

La euforia duró poco porque otra vez el bando oficialista empardó en 14 el partido a partir de la ruptura del bloque de la UCR y la creación de la bancada Liga del Interior de radicales «pelucas», de seis integrantes.


Los “pelucas” encontraron la puerta de salida del bloque liderado por Rodrigo de Loredo con la excusa perfecta y ya no volverán al redil radical (que quedó muy diezmado) al menos hasta diciembre, cuando se renueve la Cámara baja.

Esta paridad de fuerzas va a desembocar inevitablemente en una profundización de la disputa por la conducción de la comisión investigadora.


La oposición reclama para sí la presidencia del cuerpo, toda vez que la comisión se creó en virtud de una iniciativa opositora y a pesar de los votos en contra de los bloques oficialistas y sus aliados.


Sin embargo, el empate en cantidad de integrantes lleva a un camino indefinido, y amenaza con paralizar la comisión investigadora.


La presidencia del órgano es clave porque desde ese lugar es que se convoca a cada una de las reuniones informativas y se valida el quórum.


Una salida por encima del laberinto podría ser la de otorgarle la presidencia a algún diputado de la oposición dialoguista y no a Unión por la Patria, como correspondería por el hecho de constituir la fuerza parlamentaria más cuantiosa.

Más allá de a quien le toque ejercer la presidencia, el oficialismo y sus aliados podrán vaciar las reuniones del cuerpo para después argumentar que la oposición no consiguió el quórum de la mitad más uno de los integrantes de la comisión para sesionar de forma válida.


A raíz de la reconfiguración de fuerzas, la comisión investigadora, cuya integración aún debe formalizarse, quedaría conformada de la siguiente manera, con 28 integrantes en total.


Por la oposición, a Unión por la Patria le corresponden seis lugares y llegará a siete sumando a Strada, producto de la negociación con la izquierda.


Se trata de Pablo Carro, Juan Marino, Rodolfo Tailhade, Sabrina Selva, Itai Hagman y Carolina Gaillard.


A ellos se sumarán Nicolás Massot y Oscar Agost Carreño de Encuentro Federal, Danya Tavela y Fernando Carbajal de Democracia para Siempre, Christian “Chipi” Castillo del FIT y, muy probablemente, Maximiliano Ferraro y Mónica Frade de la Coalición Cívica.


En el bando oficialista estarán Gabriel Bornoroni, Nadia Márquez, Nicolás Mayoraz y la diputada monobloquista Paula Omodeo (CREO), quien aceptó sumarse al interbloque de La Libertad Avanza a cambio de un lugar en la comisión investigadora.


El PRO estará representado por su jefe de bancada, Cristian Ritondo, Silvana Giudici y Martín Maquieyra, y el cuarto integrante por el nuevo interbloque será Oscar Zago.


La presencia de este último es llamativa, ya que pasó de defender literalmente “a las trompadas” su presencia en el qúorum a favor de la creación de la comisión investigadora, a abstenerse en la última sesión convocada a tal fin. Ahora cerrará filas con el oficialismo.


El excéntrico diputado del MID se subió el precio en las últimas semanas con habilidad y astucia y sacó provecho en la negociación con el PRO para tener voz y voto en la comisión investigadora.


La UCR nombró a Karina Banfi, Soledad Carrizo y Lisandro Nieri para ser parte de la discusión Libra, pero de esos tres deberá descartar a uno al haberse reducido el tamaño del bloque.


Liga del Interior, el bloque de radicalismo “peluca”, también tendrá dos miembros con Pablo Cervi y Francisco Monti.


Por último, según pudo confirmar la Agencia Noticias Argentinas con fuentes directas, Innovación Federal estará presente en la comisión a través de la salteña Yolanda Vega y el rionegrino Agustín Domingo.

Fuente: Noticias Argentinas